A la mañana siguiente dejamos el ryokan, no sin antes pasar por su tienda de productos naturales, nos esperaba 1 hora de coche hasta nuestra visita del día Nikko y sus templos.
http://es.wikipedia.org/wiki/Nikk%C5%8D_(Tochigi)
Nuestro destino eran el Santuario Tosho-gu y el Santuario de Taiyuin-byo, donde está el mausoleo del poderoso shogun Iemitsu Tokugawa.
Visitamos en primer lugar Tosho-gu, que fue construido por orden de Iemitsu Tokugawa como mausoleo para su abuelo Ieyasu, durante años 15.000 artistas japoneses trabajaron tallando, decorando etc.
Como nota curiosa fue declarado santuario de época Meiji (durante la cual predominaba el sintoísmo) pero este santuario aún conserva muchos símbolos del budismo, incluyendo su famosa pagoda, su biblioteca de sutras y la puerta Niomon.
La sugi-namiki (avenida de cedros japoneses) que nos conduce al santuario la plantó un señor feudal del siglo XVI, y es el marco ideal para que tu mente busque el relax antes de llegar al templo.
Es un lugar muy visitado , sobre todo por el turismo nacional ,los tours operadores extranjeros se centran en el eje Tokio –Kioto, por lo que nos llamó la atención ser las únicas occidentales ese día allí.
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| Por la avenida de cedros |
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| altar del camino con las peticiones a los dioses colgadas del las ramas |
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| Edificio de la taquilla |
El complejo consta de diferentes edificios, al entrar lo primero que vimos fue su interesante pagoda del 1650, su importancia radica en sus plantas, ésta es de 5 plantas y cada una representa un elemento, tierra, agua, fuego, viento y cielo.
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| Pagoda |
Seguimos avanzando hasta la puerta Niomon, se trata de un Omotemon ,que nos contaron nuestros amigos es una puerta que al cruzarla te acerca a un lugar de sabiduría y conexión con el lado espiritual, está guardada por dos temibles figuras de Nio , la de la boca abierta pronuncia la primera palabra del sánscrito “ab” y la de la boca cerrada la última palabra “un”, si pensamos en el “alpha” y “omega” cristianos, nos queda claro el concepto ”Principio” “ y “Fin”.
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| Niomom |
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| Nio pronunciando "Ab" |
Una vez cruzamos, nos encontramos con el establo sagrado, es un edificio de madera sin pintar y un relieve de los 3 monos de la sabiduría lo decora, Kuma-chan nos informó que en la actualidad alberga un caballo regalo del Gobierno de Nueva Zelanda.
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| Monos de la sabiduría |
Junto a los lugares sagrados hay una especie de tienda, donde podemos comprar los Omamoris, podemos establecer una analogía con nuestras medallitas protectoras, y también venden Emas, tablillas votivas.
En casa conservamos muchos de estos omamoris y emas traídos de este viaje a Japón J
http://en.wikipedia.org/wiki/Omamori
Avanzamos después hacia la Fuente Sagrada, es una pila de granito de 1618 donde llevar a cabo el ritual de purificación, justo al lado está el Rinzo que contiene la biblioteca de Sutras.
Nos llamó mucho la atención los 3 almacenes sagrados por estar repletos de barriles de O-sake, nos contaron que son donaciones tradicionales al templo.
http://es.wikipedia.org/wiki/Sake
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| El Rinzo es el edificio de la derecha |
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| Fuente Sagrada |
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| O sake en el almacén |
La zona tras los almacenes alberga el mausoleo y la torre del tesoro de Ieyasu Tokugawa.
Pasamos el torreón y el campanario(como parte de su decoración tiene un diminuto relieve atribuido a Hidari Jingoro, se trata del llamado “gato durmiendo” , nuestros amigos nos contaron que su tabla votiva se cuelga en las entradas de las casas como protección, por supuesto compramos esa tablilla y ahora protege nuestra casa
J
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| Protegiendo la casa |
Llegamos al centro del Santuario, nos llevaron a visitar el Honji-do, este edificio tiene en su techo la pintura de un dragón llorón, es curioso entras en pequeños grupos y un monje te explica la pintura y el porqué de su nombre, después lo compruebas in-situ, el monje da una palmada y el eco del edificio produce un sonido que identifican con el llanto del dragón.
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| Gato durmiendo en el campanario |
Seguimos caminando hasta la puerta Yomeimon profusamente decorada con bestias y flores y como nota curiosa una de sus doce columnas muestra una imperfección hecha adrede para no enojar a los dioses y provocar sus
celos.
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| Otro detalle de la decoración del campanario |
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| Yomeimon |
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| Detalle |
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| Otro detalle de Yomeimon |
Tras un descanso obligado, nos esperaba la visita más dura, el Santuario Taiyuin-byo.
Está situado en la cima de una montaña y rodeado por un jardín de cedros, para acceder a él debes subir innumerables tramos de escaleras, gracias a los dioses que tienen rellanos entre un tramo y otro para recuperar el aliento, decoradas con infinidad de estatuas, desde ellas se tiene una hermosa vista del entorno.
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| Iniciando la subida |
Al final de la subida te encuentras con otra muestra del sentido práctico del pueblo japonés, hay una especie de merendero con máquinas expendedoras de bebida y comida, donde puedes derrumbarte (que no sentarte) para que tu corazón se recupere del esfuerzo.
Mañana os contaré la visita de este idílico santuario.
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