VIAJA CON TONBO: INTERIOR DEL CASTILLO DE PUBOL I

Como os dije en la anterior entrada la visita es guiada, pero esta guía es muy amena y necesaria para entender algunos de los rincones de este castillo.

Lo primero que nos llamó la atención al entrar en el patio fue el hermoso tapiz que colgaba de las escaleras de entrada y el efebo que nos contemplaba desde las alturas.

Efebo centinela

La visita se desarrolla por los siguientes espacios:

Salón de los escudos

Salón del piano

Habitación de Gala

Baño de Gala

Biblioteca

Habitación de invitados

Buhardilla

Repartidor

Comedor

Salida

Delme: cripta

Entramos en el Salón de los Escudos, este primer piso era el espacio de residencia, nada más entrar en este salón empezamos a ver la mano de Dalí, en la pared encontramos el origen del nombre de la sala, los escudos, podemos ver los pertenecientes a los diferentes señores del castillo.

Las telas que decoran el techo las pintó el artista en 1970 y están decoradas con flores, aves y en su centro un agujero que nos permite ver la noche mediterránea.

En el centro del salón vemos un altar con una mezcla de objetos dalinianos.

Pero a nosotros nos llamó poderosamente la atención el rincón decorado con telas azules ,se trata del trono del marqués, a los pies de la silla dorada Dalí hizo grabar una G, como descubriréis en la visita esa letra está en numerosos lugares del castillo ,para dejar bien claro que la dueña y señora es Gala.

Las demás sillas del salón están cubiertas de tela blanca a petición expresa de Gala, salvo una excepción la silla de cucharas de bronce, el artista realizó una serie de no más de 12 de esta escultura entre los años 1960 al 1974.

Otro punto sorprendente es la maestría con la que Salvador Dalí pintó el trampantojo formado por esa puerta que parece abrirse en la pared.

Fachada patio interior

Tapiz

puerta falsa

Gala posando ,junto al trampantojo

Salón de los Escudos

Continuamos la visita pasando bajo la imagen de Gala que corona la entrada al resto de las salas.

La dueña del castillo vigila la entrada

Nuestra guía nos comentó la peculiar vida que llevaba Gala en el castillo, se retiraba largos periodos de tiempo para aislarse y relajarse, en compañía de las personas que ella elegía, al ser la señora indiscutible del lugar todos los que deseaban visitarla debían anunciarse y esperar la conformidad de la dama, INCLUÍDO SU ESPOSO, fruto de este proceder son una infinidad de notas para pedir “audiencia” con la señora, que son en sí verdaderas obras de arte realizadas por Salvador y que ahora se exponen en el lugar.

Por cierto, ser el esposo no daba ventaja, no siempre era aceptada su petición de visita J

El siguiente espacio que nos aguarda es el llamado Salón del Piano, lo menos llamativo es lo que le da el nombre “el piano”, no hay rincón de este salón que no nos sorprenda.

Tienen 2 hermosos tapices, el mayor de ellos fue fabricado en Bruselas en el s.XVII, el otro más pequeño de la misma época está

¡ sobre un sofá color fresa ¡

Ni Gala ni Dalí eran grandes melómanos por eso el piano y un equipo de música que hay en otra sala eran para disfrute de sus invitados, sobre todo de un joven filósofo francés ,Michel Pastore que era un invitado muy apreciado por Gala.

La lámpara del salón fue diseñada por Dalí y parece una chimenea, en el centro de ella mandó colocar una plancha de metal que lleva grabados diminutos dibujos eróticos.

Y justo delante de esta lámpara hay unos de los objetos más curiosos del salón, una mesa redonda cuyas patas son eso ,patas, 2 auténticas de avestruz y otras 2 de yeso, pero su rareza no acaba ahí, esta mesa es una claraboya su centro es un cristal que nos permite ver lo que hay en la planta baja. Y ¿qué vemos cuando nos asomamos?

¡ un caballo blanco disecado ¡

Caballo disecado

Lámpara

Os cuento como llegó este caballo al castillo, en 1970 cuando se finalizaba la decoración de Pubol, el artista en las diferentes entrevistas que le hacían siempre decía que aceptaba regalos para la decoración del castillo y así el pintor Joan Abelló, amigo de Dalí, le regaló, para Gala, este caballo muerto que compró al empresario taurino Pere Balañà. El caballo disecado se le entregó al matrimonio en el hotel Ritz, fue subido a la 5ª planta que era donde tenían su habitación y al día siguiente Dalí organizó una rueda de prensa y se fotografió con el animal.

Dalí en la habitación del Ritz

Llegada del caballo al Ritz

Tras el inciso volvamos al salón, parece que a Gala no le gustaban los radiadores y le pidió a Dalí que los escondiera tras alguna obra, ese día el pintor no debía de tener muy altos los niveles de adoración por Gala, realizó un trampantojo para taparlos pero, lo que pintó disgustó a la señora del castillo, el trampantojo reflejaba fielmente lo que pretendía tapar, un radiador ;))

Radiado a la derecha ;))

Acabaremos el recorrido por hoy en la habitación de Gala y en su baño, la habitación que vimos en la visita es una reconstrucción en su gran mayoría, pues en 1984, una vez muerta Gala, Dalí ocupaba la habitación y provocó un incendio que lo destruyó prácticamente todo.

Antes esa habitación guardaba los objetos más privados de Gala, el fuego destruyó un valioso tocador que podemos contemplar en una foto y un icono ruso al que Gala tenía gran devoción, la cama y otros objetos se pudieron restaurar.

Nos llamó la atención el ramo de flores secas que pendía del techo, Dalí se las hacía traer de Port Lligat y están presentes en muchos lugares del castillo, su nombre popular, siemprevivas.

Por un lateral de la cama se accede a otra habitación, anteriormente era la cocina, Gala la convirtió en una sala privada, con funciones de tocador y lavabo.

La zona de la chimenea fue prolongada y se creó un pequeño baño, los azulejos que la decoran son en parte de la ciudad holandesa de Delf (en homenaje al pintor Veemeer) y los demás de la Cartuja de Sevilla (en homenaje a Velázquez).

Los grifos del lavabo y la bañera son de metal dorado, no de oro como gustaba decir Dalí.